Siendo una de las ciudades más modernas del mundo, no es de sorprenderse que Tel Aviv se haya unido, en años recientes, a la arrolladora tendencia de las ciudades más famosas: el fenómeno de las bicicletas.
Explorar la ciudad en una bicicleta tiene muchos beneficios, ya que respetas el medio ambiente, reduces considerablemente tu huella de carbono, te ahorras preciado tiempo de vacaciones que de lo contrario pasarías luchando contra el tráfico, y por supuesto que es muy saludable. Andar en bicicleta es un medio fantástico para hacer ejercicio, y como turista o visitante, la bicicleta como medio para explorar la ciudad es una manera grandiosa de disfrutar las vistas, sonidos y aromas de cerca y sin interferencia.

Estas son algunas de las actividades que hacen de Tel Aviv un fantástico lugar para andar en bicicleta:
Los carriles exclusivos para bicicletas: La ciudad de Tel Aviv es un fuerte defensor de las bicicletas como medio de transporte, y para apoyar la causa, contamos con más de 100 km. de carriles pavimentados exclusivos para bicicletas en toda la ciudad, para seguridad y conveniencia de los ciclistas de la ciudad.
El fabuloso clima: Tel Aviv disfruta de un magnífico clima todo el año con muy poca lluvia, lo que hace que la ciudad sea lo máximo para andar en bicicleta, disfrutando de la brisa fresca que proviene de la playa, en el fantástico malecón, o paseando en las increíbles calles de la ciudad con su fabulosa arquitectura de Bauhaus.
Tel-O-Fun: el Tel o Fun es un sistema económico municipal de renta de bicicletas públicas. Con Tel O Fun, los residentes y visitantes pueden tomar y dejar bicicletas de excelente calidad usando solamente su tarjeta de crédito en 150 convenientes estaciones en toda la ciudad.
Lo mejor de todo es que en Tel Aviv todo está tan cerca que puedes andar en bicicleta para ir a la playa, puedes pasear en el impresionante malecón, puedes llevar tu bicicleta para tener un fabuloso día de campo en el parque Ha’Yarkon, y puedes llevarla en las noches a los increíbles clubs y bares de Dizengoff, o al muelle.
Andar en bicicleta nunca ha sido más fácil, más saludable, ni más divertido en la hermosa ciudad de Tel Aviv.